miércoles, 5 de febrero de 2014

Si tú me gustas y yo te gusto…



Hoy las cubanas están representadas en todas las esferas sociales, no existe oficio ni profesión vedadas para ellas. Trabajan en la actualidad de macheteras, carpinteras, albañiles, choferes de grúas, soldadoras…
No hay límites para ellas, incluso en el amor.
Si antes las mujeres de esta nación se servían del abanico, del escote o de miradas para insinuarse sin poder declararse por lo claro, hoy es totalmente diferente, muchas son las que hoy dan el primer paso, las que prefieren enamorar sin prejuicios ni tabúes.
“Mira cuando a mí me gusta un hombre yo no espero que él se de cuenta algún día que yo siento lo mismo, la vida es una sola, yo soy valiente por él y por mí y se lo digo claro, hasta ahora me ha funcionado, de hecho estuve casada 15 años y a mi esposo lo enamoré, sin que me apene decirlo, vivimos años maravillosos, quizás él nunca se hubiese atrevido porque en ese sentido era bastante tímido, explica Rosaline Tamayo, económica de esta urbe.
A Juana la cubana como le dicen jocosamente a Carmen Sosa por su alegría constante no la detiene nadie, según su pareja todo comenzó por un piropo respondido: “Cuando vi a esta mulata en la calle,- me dijo con los ojos chispeantes y su brazo rodeando su cuello- solo me atreví a decirle que linda estás nena, y para mí sorpresa me respondió que yo también estaba igual”.
Esa fue la puerta para una relación que ya tiene cinco años y un niños de dos.
Según Rosario Martínez psicóloga que ha atendido a múltiples parejas refiere que “a pesar de los rezagos que todavía existen y que sólo cambiarán paulatinamente, se observa ya el espacio en todos los sentidos que han sido apropiados por la fémina cubana, incluso en temas tan íntimos como las relaciones sexuales. Aquí vienen  muchas parejas, incentivadas sobre todo por las mujeres que no se sienten satisfechas en este ámbito, y fíjate si es así que una cantidad considerable de ellas vienen con la convicción de que el problema radica en el hombre que necesita alguna orientación médica o terapeuta.
La mujer de hoy quiere experimentar, ya no es el ente pasivo de años atrás, ella propone y también dispone, brinda placer pero lo necesita recibir a cambio.”
A Angela Castellanos siempre le gustaron los hombres sin prejuicios ni reglas, por eso esta mujer de cincuenta años le ha ido bien en el amor.
“Cuando conocí a la persona con la que estoy hoy y sentí la química entre los dos lo primero que hice fue regalarle una flor. Cuando vi que aquel hombre sin vergüenzas la aceptó, me flechó directo al corazón”.
A su hija, estudiante del preuniversitario la guían las prédicas de su madre. “A mi edad es común que las muchachas sin miedos al rechazo sean las que tomen la iniciativa de enamorar, puede ser en una fiesta invitando al muchacho a bailar o simplemente hablando claro. Generalmente uno se da cuenta cuando existe una atracción física por la otra parte.”
 A ellas no las encontrarás en el silencio de la espera, ni en la respuesta  solapada de un sí, sino en la pregunta atrevida y certera, en la primera palabra.
El tiempo para amar nunca es suficiente, sin distinciones de género, hay que lanzarse a este sentimiento como huracán rompiendo cualquier esquema que impida ser feliz.

1 comentario:

  1. Sugerente artículo...., la felicito....!!
    La invito a que visite mi blog:
    gritodebairehoy.blogspot.com

    ResponderEliminar